Ejercicios de Deconstrucción del Cuerpo Humano
“A veces te aborrezco tanto, casi tanto como te quiero”
Pieza creada por: Pedro Fernández Cortina
Esta pieza es el resultado de ejercicios que se realizaron explorando qué es el cuerpo humano y la belleza en las líneas y formas que naturalmente se dan. Es un homenaje al cuerpo, enfocándose en las tonalidades de la piel mexicana. Busca una experiencia sensorial enfocada en provocar estímulos que buscan la reexploración y significado del cuerpo humano.
Al crear la exposición buscamos que logre emular ese sentir humano. Al observar nuestras piezas desde distintas perspectivas podemos encontrar formas humanas, sin la necesidad del tacto; concentrándose en formas, texturas, y colores de cada pieza.
Mediante la exploración se logró simular como nuestra piel logra reaccionar a estímulos externos y cómo puede moldearse al momento de ejercer presión. Continuamos con la exploración de peso sobre el cuerpo humano con ayuda de formas geométricas para encontrar las proporciones perfectas al momento de crear nuestras piezas. Simulamos la sensación del cuerpo amórfico en un espacio cúbico sin perder las propiedades orgánicas. Por otro lado, El tótem nos permite tener una representación métrica de una persona lo que nos permite como espectadores entender el volumen de las piezas sin necesidad de escalas y reinterpretar la sobriedad y simpleza que conllevan.
El proceso creativo de Pedro surge de trabajar con el cuerpo humano por medio de un estudio geométrico a través de formas abstractas, principalmente la esfera. El equipo ROKAM buscó ante todo, transmitir al espectador emoción a través de formas parcialmente similares al cuerpo humano como el color de la piel, el poro, las estrías y todas las imperfecciones que pueden haber. Es un tributo a la humanidad, a través del equilibrio ya que todas nuestras piezas están sobrepuestas. Un ejercicio de exploración que busque la perfección, la belleza y la verdad.
El artista se ha cuestionado toda la vida; ¿qué es la belleza? No existe nada más perfecto que el cuerpo humano aun cuando sabemos que es imperfecto.
Tal y como la instalación, la exposición tiene imperfectos pero al momento de verla como un todo nadie los nota, ya que la pieza tiene una potencia por sí misma y no en sus detalles. La belleza es igual a la verdad; subjetiva. Es un puente a los sentidos y a las experiencias y aprendizajes que recopilamos a lo largo de nuestra vida, donde todos los conocimientos pasan a través de los sentidos.
Por último; la frase no solo es un homenaje al escritor mexicano Jaime Sabines, es la interpretación de cómo podemos amar algo tanto como nuestro propio cuerpo y al mismo tiempo odiarlo al no ser capaces de mostrarnos al mundo tal y como somos, con nuestras perfectas imperfecciones.